lunes, 26 de abril de 2010

Carta a l@s integrantes del Frente Solidaridad Cucapa.

Resulta interesante la reacción solidaria de las diferentes organizaciones, individuos y grupos que se sumaron en apoyo a las comunidades cucapas y a los habitantes del Valle de Mexicali. Inmediatamente algunos individuos se dieron a la tarea de coordinar los esfuerzos que desde distintos lugares se venían efectuando, lo que ante la situación dio por resultado de forma positiva, la creación de comisiones para coadyuvar en las distintas actividades que tenían por objeto el brindar ayuda inmediata a las comunidades arriba mencionadas.
El día domingo 11 de abril se reunieron miembros del CESA, de las escuelas y facultades universitarias, así como individuos pertenecientes a distintas agrupaciones en apoyo a los afectados por el desastre del 4 de abril. En dicha reunión se hablo sobre los acuerdos que habrían de delinear la asociación de esfuerzos, se hablo tanto de la creación de comisiones, de la comunicación como prioridad, así como de los principios que delineaban esta sociedad.
Palabras y palabras que vociferaban por la no politización de un movimiento autentico de ayuda solidaria con nuestros hermanos en pena. Palabras que clamaban la transparencia como fantasma de la institucionalidad insertada en nuestras mentes, como si nuestra solidaridad se tratara de las dadivas gubernamentales que supuestamente abastecen las necesidades de la población en desgracia y que por supuesto requieren de la fiscalización de una sociedad que reconoce en lo gubernamental la guarida preferida del ladrón que se escuda tras la Ley.
Nuestra solidaridad compañer@s, si es que nos reconocemos como tales, no necesita rendirle cuentas a nadie dado que esta ha surgido como un sentimiento autentico en nosotros y en ningún momento nos hemos visto coaccionados, ni obligados desde el exterior a ayudar. Si se quiere y si esto puede expresar mejor a lo que me refiero esto ha surgido desde el fondo de nuestro corazón, por lo tanto resulta inútil una comisión de transparencia, ¿o que acaso alguno persigue otras intenciones más allá que el ayudar?
Respecto a la estructura organizacional creada para coordinar esfuerzos, me parece que tanta insistencia en recalcar la naturaleza ligera de la misma no escondía tras de si mas que la intención de centralizar el proceso de decisiones, recuerdo muy bien haber propuesto una comunicación horizontal donde cada miembro de cada unidad o sin ella tuviera acceso a entablar relaciones con los demás compañeros, recuerdo una persona hablando que el hecho de la existencia de comisiones no excluía mi posición; sin embargo, lo que me encuentro en el primer correo que recibo de este supuesto frente es una comunicación vertical, centralizada, que esconde los contactos de los mailto:compañer@s con el motivo de no aparecer como Spam, que pretende organizar a su modo y acumular poder mediante el manejo de la información. Y no lo digo “a tientas”, quien conozca algo sobre teoría de las organizaciones que me desmienta.
“La acción, la acción es lo importante”, se escucho desde el fondo de la pequeña reunión del 11 de abril y todos asentimos contra a la propuesta de aglutinarnos bajo un membrete, al parecer instintivamente estábamos rechazando lo que pudiera ser las obscuras intenciones de ciertos integrantes y animadores de esta “pequeña estructura”, no me extraña los individuos ahí presentes no deseaban alienar su voluntad en una organización con individuos que apenas y conocían, y sobre todo los integrantes de los grupos de ayuda no deseaban perder su autonomía; sin embargo, otra vez mi sorpresa cuando recibo el primer correo, inmediatamente algún integrante o algún grupo de integrantes de la reunión ya nos había bautizado con el nombre de Frente solidaridad cucapa, debo decir y me habrán de disculpar, que poca madre! Decidiste o decidieron por mi, y ya mejor ni decir que hasta el nombre te o se chafearon de otra organización. “No necesitamos nombres, necesitamos actuar” se dijo, he ahí la voluntad de aquella asamblea y tu te la pasaste o se la pasaron por donde les dio tu o su rechiflada gana. ¿Que no? Pregunto.
Y cuando envío un correo para informarme sobre esto, un miembro de la comisión de comunicación se atreve a decirme que no es tiempo de cuestionamientos, y ¿por qué no?, yo no represento a nadie me represento a mi mismo y esta es mi opinión y son mis inquietudes, por que yo permití así como tu que me lees que existiera esta coordinación, y he participado a mi modo y con mis posibilidades en las ayudas a las comunidades y por que ahí estuve en la reunión del 11 se que eso no fue lo que se acordó.
¡No politización! ¡Que va! He ahí autenticas maniobras de politiquillos de banqueta de uno que otro de los integrantes del supuesto frente, mismos que tienen sedimentadas en su cabeza las practicas de un marxismo rancio que siempre lleva como santo y seña antes de un ismo el nombre de alguno de sus falsos salvadores, llámese lenin, (así con minúscula), u otro mas abajo en el Partenón bolchevique. No cabe duda que ídolos muertos son para gente muerta, ¡pero ah como molestan a veces! Ojo no de Marx que reconozco como estudiante de ciencias sociales sus valiosas aportaciones a las mismas, pero no como verdades absolutas como algunas gustan tomarlas, sino mas bien como andamiaje para nuevas investigaciones.
Compas me habrán de dispensar mi actitud crítica, pero pensándolo bien, esta actitud no merece las disculpas de nadie, más bien requiere que otros realicen ejercicios de esta naturaleza, tal vez así el mundo no estuviera tan jodido y los más jodidos no estarían tan jodidos. Debo decir que si no hubiera escrito a la comisión de comunicación no hubiera podido enviarte esto directamente ni publicado nada. Así como al organizarnos para solidarizarnos con los cucapas, dejamos de lado la representación y participamos, así podemos cambiar muchas situaciones que hacen de nuestra vida un espectáculo donde nosotros solo somos simples espectadores. Ante todo compañer@s permítanme felicitarnos por nuestra labor y que estas palabras sean tomadas como una opinión que no representa a nadie, mas que a quien la firma.
Salud!