Analisis desde el anarquismo: Motin en el penal de Tijuana 1era parte.

El motín de los internos comenzó el domingo 14 a las 2:00 pm y se logró contener alrededor de la 01:45 de la madrugada del lunes 15 de Septiembre en el penal de la mesa de Tijuana mejor conocido como el pueblito.

Al parecer los reos de los edificios seis y cinco estaban enojados debido a que el sábado 13 de Septiembre alrededor de las 9 de la noche , custodios dieron muerte a golpes a Israel Blanco Márquez, de 18 años, preso por desmantelar un vehículo y a quien habrían sorprendido con un celular durante una revisión en el edificio 5 de la celda A-8 del penal para revisar a 23 reos a los que comenzaron a golpear supuestamente vinculados con la distribución de droga.

Familiares de Israel Lázaro contaron que fue sometido a una sádica tortura, sumergiéndolo en una cubeta con agua y cloro para 'interrogarlo' y luego lo sofocaron con una bolsa de plástico con la que le cubrieron la cabeza y rostro, pero el martirio se prolongó hasta que le causaron la muerte por asfixia.

La arbitraria actuación del comandante en turno David Montero, y sus esbirros provocó un motín de los más de cinco mil reclusos del penal, que se inició a las 2:20 de la tarde del Domingo y que minutos después se salió de control, al punto de que los internos se apropiaron de las instalaciones y tomaron como rehenes a tres custodios recogieron sus armas y tuvieron bajo su control a una parte de las familias que se encontraban de visita en el penal.

Una hora después inició un operativo policiaco-militar, para controlar la movilización de los internos que se parapetaron en dormitorios; además, unos 300 reos se apoderaron del techo del inmueble, desde donde exigieron “justicia”, además de mostrar mantas y cartulinas con las leyendas “no más muertes, custodios asesinos” y “exigimos mejor trato”.

Los reos quemaron colchones, sillas y mesas, además que empezaron a salir de sus celdas justo cuando terminaba el horario de visita, para manifestar su inconformidad por lo que llamaron “abusos” del personal del Sistema Penitenciario Estatal.

Familiares de los reos se mantenían afuera de la penitenciaría; sin embargo, algunos de ellos protestaron por el operativo incendiando cuatro vehículos estacionados en las inmediaciones, además de romper los cristales de por lo menos una decena de automóviles.

Unas 200 personas, todas familias de los internos, observaban a menos de 100 metros el desenvolvimiento del motín y celebraban cada logro de los presos.

Alrededor de la 9 de la noche se suscitó otro zafarrancho cuando los internos comenzaron a lanzar bombas molotov por lo alto de la barda perimetral hacia la calle e incendiaron cuatro vehículos; también arrojaron cientos de piedras, mientras que los policías y custodios lanzaban decenas de granadas lacrimógenas al interior.

Unos 30 vehículos estacionados en las inmediaciones de la Penitenciaría quedaron semidestruidos, 5 de ellos quemados en su totalidad por bombas molotov que arrojaron los internos y que provocaron diversas explosiones a lo largo del amotinamiento.

militares y de todas las corporaciones policíacas acordonaron un perímetro de varios kilómetros a la redonda para evitar el ingreso de curiosos, sin embargo familiares que exigían saber de sus parientes si lograron romper el cerco policiaco en varias ocasiones por lo que se registraron varios conatos de enfrentamiento en el exterior del penal.

Un helicóptero de la Secretaría de Seguridad Pública de Baja California participó en el operativo para retomar el control del penal, desde el cual se dispararon ba- las de goma, al tiempo que agentes de la Policía Federal Preventiva realizaron disparos de armas largas al aire para amedrentar a los internos, y colocar escaleras en su intento por devolver el orden en la penitenciaría .

Afuera del Cereso permanecieron familiares que preguntaron por el estado de salud y situación de sus internos, y se habla de 4 muertos y varios heridos, pero hay versiones que mencionan que hay mucho más cuerpos hasta ahora y el 60% de las instalaciones están dañadas por el motín.

Las autoridades esperaban que se quedaran quietos ante la injusticia, que no dijeran nada y siguieran soportando las vejaciones, la lógica demente del estado ante esta situacion, como respuesta una violenta represión policial a los internos.

Frente a esto y en los hechos, fuego y piedras contra la autoridad y las instalaciones como respuesta!!

Nada tienen que perder ellos ante esta situación, mas que rebelarse contra los puercos y la estúpida autoridad que controla el penal!!!

Destrucción y caos para el sistema penitenciario y el orden impuesto a ellos, es la actitud de ell@s los internos hasta que sean satisfecho sus demandas de justicia, mejor trato y alimentación!!!